¿Cómo identificar averías en tu aire acondicionado?
La climatización es un campo complejo donde, si quieres disfrutar del mejor servicio posible, tendrás que estar muy atento a todo tipo de detalles. Existen muchas maneras de identificar las averías que no necesariamente suponen que el dispositivo deje de funcionar y en Grupo Inge queremos resolverte todas las dudas al respecto.
Puede que no estés disfrutando del máximo rendimiento en tu instalación de aire acondicionado y no seas consciente del problema, ya que existen algunas averías que no son demasiado identificables. Más allá del no encendido, puedes encontarte algunos síntomas inesperados que serán la señal de un mal funcionamiento del equipo, lo cual podrá ser solucionado con el trabajo del servicio técnico.
Por tanto, para que el objetivo de tener una climatización ideal siempre sea posible será imprescindible conocer las siguientes señales de avería. ¡Presta atención!
1. Mal olor
En muchas ocasiones, no relacionamos ciertos síntomas con el estado de nuestra instalación de aire acondicionado, o al menos no los entendemos como graves. Si cada vez que lo encendemos, notamos un olor desagradable, deberíamos solicitar inmediatamente los servicios de un técnico.
Y es que esto es un signo inequívoco de una excesiva acumulación de suciedad en los filtros, y aunque esto es solucionable con una limpieza, puede que el daño ya haya sido causado, lo que exigirá una rápida actuación para evitar males mayores.
2. El ruido
Otro de los problemas más habituales es el ruido. A veces, nos acostumbramos y entendemos como lógico el hecho de que nuestro dispositivo emita un sonido excesivo, como producto del paso del tiempo. Sin embargo, esto puede ser el inicio de un fallo más importante.
Por ello, resulta conveniente solicitar una inspección, nada más detectar este tipo de ruidos, porque pueden ser la pista de un fallo en el compresor, la pieza de la que depende todo el funcionamiento del aire acondicionado, aunque puede que el problema sea menor y solo afecte al sistema del ventilador.
3. No enfría lo suficiente
¿No has notado que por mucho que bajes la potencia de tu equipo, la temperatura de la habitación no termina de refrigerarse? En ese caso, es posible que tu aire acondicionado tenga una fuga de gas, que es la causa más común de averías en este tipo de dispositivos.
Los motivos de estas averías son múltiples, pero entre ellas, algunos de los más comunes son la mala instalación del equipo o que el tubo externo tenga una rotura que dé pie a la fuga.
4. La luz se enciende pero no hay respuesta
En alguna ocasión, al encender el aire rápidamente, nos percatamos de que las luces se han encendido y nos despreocupamos, pero al cabo de un tiempo, la temperatura se mantiene idéntica.
Si volvemos a repetir la operación, obteniendo el mismo resultado, estaremos ante una clara avería que requerirá unos servicios especializados.
Lo mejor de todo es que todas estas averías son evitables. Si quieres contar con la climatización perfecta, las revisiones periódicas pueden asegurar el mantenimiento de tu instalación. Para estos asuntos, no dudes en contar con Grupo Inge. ¡No te decepcionaremos!